Por: Manuel Alejandro Rosero Castillo

Tribunal del Distrito Sur de Nueva York analizó si la creación de las obras de Andy Warhol está cubierta por el fair use”

Recientemente, el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York tuvo que analizar si Andy Warhol estuvo cubierto por el fair use al momento de crear sus icónicas obras, o si éstas podían constituir una infracción al Derecho de Autor.

Todo comenzó el 2 de diciembre de 1981, cuando la fotógrafa Lynn Goldsmith, retrató a Prince en el Palladium de la ciudad de Nueva York. Estas fotos no cumplieron su objetivo de ser publicadas en la Revista Newsweek, sino que una de las fotos fue licenciada a la Revista Vanity Fair en 1984, sin que dicha licencia mencionara que esta foto podría ser utilizada como material de trabajo del artista Andy Warhol. No obstante, la Revista Vanity Fair encomendó a Andy Warhol crear las ilustraciones que acompañarían el artículo titulado “Purple Fame”, y que fue publicado en noviembre de 1984. En contraste con la fotografía de Lynn Goldsmith, el trabajo final que se publicó en la portada de la Revista Vanity Fair contaba con un fondo naranja y el rostro de Prince resaltaba en color morado, de las cuales se desglosaban otras 11 imágenes que contaban con las contribuciones de color y diseño que les aportaba Andy Warhol.

Como es conocido, el 21 de abril de 2016, Prince falleció, ante lo cual la Revista Vanity Fair le dedicó uno de sus artículos donde aparecía la portada que diseñó Andy Warhol en 1984, por lo que Lynn Goldsmith al conocer esta publicación, demandó las ilustraciones de esta revisa, en tanto argumentó que el trabajo de Warhol “es sustancialmente similar” a su fotografía, y por lo tanto no es considerada cubierta por el fair use de una obra.

El 1 de Julio de 2019, el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York consideró que la creación de las 12 obras de Andy Warhol está cubierta dentro del fair use, puesto que las fotografías se transformaron a tal nivel, que al someter las ilustraciones al “test del observador ordinario”, dichas obras de Warhol “tienen un carácter diferente, le dan a la obra original una nueva expresión, y emplean nuevas estéticas con resultados creativos y comunicativos”.

El Tribunal de Nueva York consideró que los elementos protegibles de la fotografía tales como “…posición de los objetos, iluminación, ángulo, elección de película y cámara, evocar la expresión deseada…”, fueron eliminados en su mayoría, ya que la estética de las imágenes cambió inherentemente por el diseño que Warhol le dió por medio del uso de los colores y el posicionamiento de las sombras del rostro del artista. A la par, se consideró que las obras publicadas en el “Vanity Fair” no son sustitutas en el mercado, ya que la demandante no aportó las pruebas suficientes para demostrar que la circulación de estas imágenes disminuyó o pusieron en peligro el valor comercial de sus fotos o de su capacidad de negociar las mismas en el mercado.

Por último, el Tribunal del Distrito del Sur de Nueva York consideró que efectivamente se afectó el derecho que tenía Lynn Goldsmith sobre su fotografía a nunca ser publicadas, sin embargo, argumentó que este derecho puede ser limitado por el uso legítimo de una obra (fair use), en tanto la copia que se reproduce en la obra de Warhol tiene tales modificaciones que no permiten que la obra original se distinga bajo “el test del observador ordinario”.

La decisión puede ser consultada aquí.